Cómo hacer la previsión de gastos e ingresos de una empresa

A la hora de emprender un negocio es indispensable calcular la viabilidad del mismo, de forma que no nos embarquemos en una aventura en la que invirtamos mucho dinero que esté abocado al fracaso desde el inicio. Además, cuidar los gastos de cualquier negocio durante la explotación del mismo también es de gran importancia, para saber qué rentabilidad tiene la empresa y cómo de saneadas están sus cuentas. Es por ello fundamental, sobre todo al inicio y durante el primer año de vida de un negocio, saber realizar una previsión de gastos e ingresos de una empresa y cómo calcular los gastos de un negocio.

Previsión de gastos e ingresos de una empresa: ¿por qué es necesario?

Los gastos en que incurre una empresa son muy diversos, desde el salario de los empleados, hasta el transporte de la mercancía y el pago de las materias primas, entre muchos otros. Además, hay gastos de naturaleza fija en los que se incurrirá independientemente del volumen de trabajo (por ejemplo, el alquiler del local) y otros de naturaleza variable que variarán dependiendo del volumen de producción (por ejemplo, el volumen de materias primas que se deberán comprar para poder realizar los productos comercializados).

Para tener un correcto control de los gastos y costes en que incurre una empresa, es preciso llevar a cabo una adecuada previsión de los gastos e ingresos de la compañía. La previsión financiera de una empresa no es sino una proyección de todos los ingresos y gastos que experimentará a futuro la empresa. Además, la previsión de gastos y contabilidad de una empresa es fundamental por los siguientes motivos:

  • Se consiguen fijar objetivos más asertivos: una buena previsión de gastos e ingresos permite a la empresa fijar objetivos más asertivos y realistas, ya que se tienen en cuenta los datos financieros de la entidad y otros criterios. De esta forma, se fijarán objetivos que se puedan conseguir con base en datos objetivos, evitando que el presupuesto se agote o que la empresa se frustre al no alcanzar un objetivo que no era realista.
  • Mejora en la gestión empresarial: gracias a la previsión de una empresa, es posible gestionar de forma adecuada y más eficiente las finanzas de la empresa, basándose en indicadores objetivos y creando planes de acción que aborden cuestiones específicas. Además, facilita la optimización de los gastos y de la logística de la entidad.
  • Mayor seguridad financiera: la previsión financiera de una empresa da seguridad a las cuentas de la misma, facilitando el llevar a cabo una provisión y una protección de los recursos económicos de la compañía. Además, gracias a la previsión financiera, es fácil descubrir cualquier uso fraudulento de los recursos económicos de la compañía.
  • Aumento en las ventas de la empresa: el adecuado control del inventario y de las necesidades de la empresa facilita la gestión de la demanda de los clientes. La mejor gestión de la demanda puede redundar positivamente en las ventas de la empresa.
  • Mayor confianza de los clientes: gracias a la mejor gestión de la demanda que se lleva a cabo a través de la previsión de gastos e ingresos se interactúa más con los clientes y su confianza en la entidad aumenta.
  • Mayor control sobre los recursos económicos de la empresa: gracias a una mejor previsión de los gastos, es posible no realizar gastos superfluos, sobre todo en materias primas. Si se prevé bien cuál va a ser la demanda de los clientes, la empresa podrá comprar materias primas o contratar al personal de forma proporcional a dicha demanda, de forma que no haya excedente y, por tanto, que no se dilapide el dinero.

Cómo hacer una previsión de gastos e ingresos

El futuro es incierto y en el momento que atraviesa nuestro país emprender es tarea difícil. Es por ello fundamental no pecar de optimismo y no hacerse castillos en el aire a la hora de poner en marcha un negocio. Para lograr este objetivo la previsión de gastos e ingresos es esencial para cualquier empresa. Veamos cómo se lleva a cabo.

Previsión de ingresos

La partida de ingresos ha de ser realista y, al mismo tiempo, ambiciosa. De esta forma, no nos debemos quedar cortos al hacer el presupuesto, pero es igual de inconveniente pecar de optimistas. Para hacer una buena previsión de ingresos se deberán tener en cuenta las siguientes cuestiones:

  • Volumen de ventas y precio del producto: para ello, es preciso estudiar la demanda que de ese producto hay en el mercado, qué necesidades suple, qué precio tiene y si este es muy similar al mismo producto vendido por la competencia, qué novedades incluye, etc. Para poder hacer una buena estimación de las ventas es necesario hacer un estudio previo del mercado.
  • Determinación del volumen de la demanda del producto: en relación con el estudio previo de mercado que se haya llevado a cabo se podrá determinar cuál es la demanda del producto que se pretende comercializar.
  • Financiación durante el primer año: durante el primer año de vida, cualquier negocio o no arroja beneficios o son pocos los que consigue. Así pues, es una buena idea contar con financiación extra al menos durante el primer año de vida de la empresa. Esta financiación se deberá tener en cuenta en la previsión de ingresos, así como en la previsión de gastos.
  • Valoración de la competencia y del público objetivo: se tendrá que valorar qué valor añadido aporta el producto que pretendemos vender y cuál es el perfil de nuestro público objetivo (cuánto gasta, cuál es el target de edad, el sexo de la clientela, etc.).

Previsión de gastos

Para valorar de forma adecuada la estimación de los gastos de la empresa se deberán tener en cuenta las siguientes cuestiones:

  • Costes impositivos: a la hora de elaborar un presupuesto es fundamental tener en cuenta el pago preceptivo del Impuesto de Sociedades o del IVA, entre muchos otros. También se deberán tener en cuenta el pago de tasas, derechos de propiedad o licencias de software.
  • Logística y proveedores: es imprescindible tener en cuenta todas las fases de la cadena de suministros, determinando muy bien cuáles son los gastos en concepto de proveedores y de transporte. Estos costes son fijos, por lo que cada mes la empresa deberá hacer frente a ellos, independientemente de los beneficios.
  • Costes de marketing y publicidad.
  • Financiación.
  • Inversiones: cuando se pone en marcha un negocio invertir es imprescindible. Así, se deberán adquirir las materias primas para fabricar el producto a comercializar, el alquiler de la oficina, el coste de la maquinaria, etc. Una buena previsión de gastos supondrá mucho ahorro de dinero sobre esta cuestión.
  • Hacienda y Seguridad Social: el empresario deberá pagar las cuotas de ambas administraciones.
  • Salario de la plantilla de empleados.
  • Suministros de electricidad, agua, gasolina, telefonía móvil o Internet.

Sin duda, cuando se emprende un negocio es fundamental llevar a cabo una buena previsión de gastos e ingresos, de forma que se pueda estimar mejor la viabilidad de la empresa, ahorrar costes y utilizar los recursos de forma más eficiente.