¿Cómo empezar mi propio negocio? Emprender en uno no es tarea fácil, máxime si tenemos en cuenta las restricciones derivadas de la situación de pandemia provocada por la COVID-19 en que nos encontramos. En los momentos actuales que España y el resto del mundo están atravesando es especialmente difícil poner en marcha un negocio. Sin duda, autónomos y pequeñas y medianas empresas han visto la cara más cruda y difícil de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus. Es por ello fundamental, teniendo en cuenta la situación en que nos encontramos, saber cómo ahorrar tiempo y dinero a la hora de emprender un negocio, poniendo en marcha una serie de consejos para emprender un negocio.
Consejos para ahorrar tiempo y dinero si eres autónomo
Si tienes pensado poner un negocio propio en los tiempos que corren, deberás tener muy en cuenta que es imprescindible recortar el gasto todo lo que puedas para que el negocio sea viable. Además, no solo es imprescindible ahorrar dinero, también el ahorro de tiempo es importante. Poniendo en práctica los siguientes consejos, podrás ahorrar tiempo y dinero a la hora de emprender un negocio.
Control de los gastos
Poner en marcha un negocio conlleva una multitud de gastos a los que un autónomo tendrá que hacer frente. Además, al inicio del negocio no suelen existir beneficios. Es por ello fundamental tener controlados de forma adecuada los gastos, de forma que cuadren las cuentas y el negocio no resulte inviable.
Para llevar un adecuado control, es imprescindible separar los gastos del negocio de los gastos personales, separando la cuenta bancaria corriente de una cuenta profesional dedicada en exclusiva al negocio. De esta forma, es mucho más sencillo llevar un control de los gastos de la empresa y no realizar compras superfluas cuando se tiene una cuenta bancaria exclusivamente para la actividad del negocio, así como se facilita la gestión de la contabilidad.
Creación de un presupuesto y una previsión de gastos e ingresos
Para controlar mejor el gasto, es una gran idea elaborar un presupuesto con la previsión de gastos que implicará el negocio para cada ejercicio. En esta previsión, deberán aparecer los costes fijos del negocio (alquiler del lugar en que se desarrolla el negocio, el salario de la plantilla de empleados, los gastos en publicidad y en marketing, o el pago de los suministros como la luz o el teléfono, entre muchos otros), así como los costes variables —aquellos gastos que dependerán del volumen de actividad generada por la empresa o el negocio, tal y como ocurre con la compra de materias primas—. Además, es importante reservar alguna partida para imprevistos o gastos urgentes y extraordinarios.
Asimismo, se deberán prever los ingresos que se esperan obtener con la actividad del negocio, de forma que se pueda analizar la posible rentabilidad y viabilidad del negocio.
Contratación de una cuenta bancaria
Para llevar un mejor control del gasto y una mejor previsión de este resulta conveniente la apertura de una cuenta bancaria profesional. Gracias a este tipo de cuentas bancarias —que son comercializadas por multitud de entidades bancarias—, es sencillo separar los gastos personales de los gastos derivados del negocio o empresa. En el caso de las empresas, la legislación española vigente obliga a los empresarios a separar los gastos profesionales de los gastos personales, de forma que estos estarán obligados a abrir una cuenta profesional al margen de la cuenta bancaria corriente que utilicen de forma personal.
Esta obligación no existe para los autónomos, pero, sin duda, es una buena forma de controlar mucho mejor el gasto, no incurrir en compras o costes superfluos y no necesarios ni vinculados con el negocio, poder realizar una mejor previsión del gasto y una adecuada gestión de la contabilidad. Además, de cara a una posible inspección de la Agencia Tributaria o a la tributación de impuestos, es mucho mejor poder acceder a los gastos profesionales de forma sencilla e independiente a los costes personales.
Ahorro en suministros
Los suministros como la electricidad, el teléfono o Internet son gastos fijos e imprescindibles para poder explotar cualquier negocio hoy en día. Al ser costes fijos, es mucho más sencillo ahorrar en esta partida:
- Prescinde del teléfono fijo y deja el teléfono móvil como única vía de contacto.
- Contrata una tarifa móvil con llamadas ilimitadas.
- Contrata la tarifa de Internet que necesites. Si tu negocio no precisa de un Internet de alta velocidad, no lo contrates, ya que este tipo de tarifas suelen ser mucho más caras.
- Intenta desconectar los aparatos que no estés usando, pues supondrá un ahorro en la factura de la luz.
- Pon la calefacción o el aire acondicionado a una temperatura adecuada, de forma que también supondrá un ahorro en la factura.
- Los gastos en Internet y telefonía son deducibles, siempre y cuando se cumplan los requisitos legalmente establecidos.
Apuesta por la banca online
Ya hemos apuntado la importancia de tener una cuenta profesional para los gastos derivados de la explotación del negocio. Teniendo en cuenta que nos encontramos en la era de la tecnología y de Internet, resulta beneficioso apostar por la banca online. Sin duda, contratar una cuenta bancaria con una entidad bancaria que ponga a disposición del cliente aplicaciones a través de las cuales gestionar sus finanzas supone un gran ahorro de tiempo, ya que gracias a las aplicaciones móviles o a las páginas webs se pueden llevar a cabo prácticamente la totalidad de operaciones bancarias desde la comodidad de la oficina. De esta forma, no es preciso perder buena parte de la jornada laboral en la sucursal del banco.
Contrata una buena asesoría fiscal
Además de suponer un buen ahorro de dinero, la contratación de un asesor fiscal también conlleva un importante ahorro de tiempo. El asesor financiero está suficientemente formado para la gestión de la contabilidad, para el control de los gastos y para llevar a cabo la tributación de impuestos.
Sin duda, poniendo en práctica estos consejos, podrás ahorrar tanto tiempo como dinero a la hora de emprender tu propio negocio y sabrás cómo empezar tu propio negocio. En estos tiempos difíciles en los que emprender es más difícil que nunca, aplicar estas prácticas resultará muy beneficioso.